Su corazón aun latía sobre sus manos. Ese músculo, latente, amorfo, todavía tarareaba su agonía.
La noche había caído hacia más de dos horas, pero el cielo aun no se enteraba de su entierro.
Ernesto, así lo habían rotulado, delgado, con la tez curtida del tiempo y los huesos estirados, manos quebradas por la vida y una mirada perdida, vaya a saber uno donde.
Ernesto, caminaba por la calle siguiendo el compás de su desgracia.
Cuantas horas pasaba con la cara pegada al vidrio, mirando fija aquella hamaca, ya destruida por tantas generaciones que se habían mecido sobre ella.
Por las mañanas, visitaba la panadería, 1 Kg. De pan, que nunca podía terminar el solo, sin embargo, al día siguiente repetía el ritual.
En las tardes, deambulaba por el parque Rivadavia, en busca de ese libro que ni el sabia cual era.
Se perdía….se perdía tanto; se perdía entre la mueca que cruzaba el semáforo, en ese bastón de aquel anciano en el café, en esas manos que le devolvían el vuelto, manos tan frías y blancas, como porcelana recién amasada.
Y así pasaron los días, los meses, los años, siglos sobre la ventana; rasqueteando esa pared del comedor (intentando desempapelar las huellas de la vida anterior)
Inmerso en la llanura, Ernesto no tenía sueños alucinantes, ni pesadillas pecaminosas.
Con sorpresa, una mañana al caminar hacia la panadería de siempre, sintió unos escalofríos que le electrizaban toda la piel, dibujando hilitos eléctricos en su cuerpo.
La panadería, había cerrado.
Sintió su mundo caer. Como esa pintura que se chorrea; como esa alfombra quemada por una multitud de fumadores despreocupados.
3 comentarios:
me encantó, sépalo con toda la sabiduría de maga profunda ke lleva en sus retinas niña nocturna, sépalo..
Revivir tiene sus ventajas siempre y cuando mantenga en llamas una ilusión...Que la panadería no cierre, que la ventana sigua abierte. Que haya té para dos, para vos y yo. Y también para algún visitante más. Saludos.
leyendo un par de mis escritos enconré un comentario tuyo, solo paso para hacer la pregunta esa ke dá mas conversacion ke un como andás, como estás niña?
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